Huesario.

Fin del juego

Gotham 25 km, especificaba la señal que terminaba de pasar, con mi moto la bikewing, con turboacelerador de energía Gamma y variedad de armamento y escondites para mis armas de mano. Soy Nightwing.
Todo comenzó hará dos días cuando me llamaron para ver el escenario de un crimen, era todo horroroso, la victima era el presidente de la asociación contra el crimen del país y su familia, a todos les torturado y arrancado la mitad del rostro. Ojeando la escena encontré una moneda, que no tenia reverso, solo tenia dos caras, eso me recordaba, lo que ocurrió 5 años atrás, cuando asesinaron a mis padres en el circo, fue un hombre que siempre estaba lanzando una moneda especial para decidir el destino de sus victimas, yo me salve porque no me encontraba bien ese día, desde entonces jure vengarme.
Como no tenia pistas de donde encontrarle decidí ir a hablar con mi antiguo compañero, amigo y mentor Batman, seguro que el sabia por donde se movería el asesino.
Acababa de llegar a Gotham, y de inmediato me puse de camino hacia la Batcueva, cuando llegue, Batman estaba esperándome, y me puso al por los sitios donde se encontraba el asesino, cuando estaba apunto de irme, Batman me cogió y me dijo que no iría solo, él, Robin y Batgirl me ayudarían a encontrarlo. Nos separamos y fuimos a buscarlo por los distintos lugares que solía frecuentar, con la condición de que nadie entraría solo a por él, esperando a que llegaran los demás. No hubo suerte, ninguno lo encontró, aunque solo faltaba mirar el sitio mas obvio, en el que nunca nadie miraría, el despacho donde ejercía de abogado anteriormente,
Efectivamente, cuando llegamos, allí estaba sentado en su sillón de cuero lanzando una moneda al aire, cuando giró la butaca pude observar que el misterioso asesino, era Dos Caras.
No se inmutó cuando nos vio, parecía que nos estaba esperando, cuando nos lanzamos a por él, se activaron innumerables trampas activadas por movimiento y nos vimos atrapados, casi sin poder movernos. Cuando pensábamos que esto seria nuestro fin, oímos un chasquido en el aire y como las trampas se desactivaban, al girarnos vimos a Catwoman con su implacable látigo, que había desactivado las trampas, y con otro chasquido del látigo vimos como le quitaba su moneda favorita de las manos, corriendo detrás de ella tropezó, y aprovechando el descuido, me lancé hacia él, cuando me vio, disparo dos veces con una pistola oculta, pero gracias a mi entrenamiento de artes marciales y que fui trapecista, gire en el aire y conseguí evitarlas, cayendo encima de él.
Cuando estaba a punto de terminar con él, Batman me cogió por detrás y me dijo que si lo hacia me convertiría en lo mismo que él, en un asesino, pero que entendía mi situación, ya que él también la sufrió, y me dejaba decidir si matarlo y vivir toda la vida con su muerte en mi conciencia o dejarlo vivir y que pagara por sus actos.
Lancé mi puño hacia Dos Caras, pero impactó en el suelo, atemorizado lo llevamos ante la justicia y ahora esta encerrado en el asilo de Arkham.
Los cinco que estábamos esa noche, hicimos una promesa, cuando hubiera un villano con el que uno solo no pudiera, haríamos efectiva la señal de radio que acabábamos de crear para avisar a los demás y acudir lo mas pronto posible para que la justicia volviera a las calles. Nos llamaríamos los Justicieros nocturnos.