2º parte de la historia... esto de las entregas me está gustando
Bingo!!!
Es de esas veces en las que piensas…”por qué será que no me termina de sorprender”

. Pero… te sorprende.
Antes he dicho que el club med (en mi zona) es frecuentado por franceses… por ende, los monitores a demás de su lengua materna (lo ideal es que sean franceses) hablen el “gavacho” y se defiendan en inglés… Primera frase??? Hola, hablas francés??

Obviamente… si me hago la longui con el resto… y no me relaciono… tenía que seguir en mi sitio…: No.
El chico terminó hablando en inglés

… No hay nada para quitarse los problemas de encima como la barrera del idioma. La conversación fue lo más típico del mundo, predecible… me invitó a conocer las instalaciones del Club…

. Decliné la oferta. Ya conocía al club, llevo “colándome” en él desde los 8 años

.
Mi padre no tardó en percibir que su llegada no era la única que había suscitado interés. Por no decir que aquello olía a emboscada por todas partes…

. Reaccionó rápido, pero el negro también… en un pis pas…. Se esfumó.
Ya había tema del día y “cachondeito”… para el resto de verano. Vuelta al estado de observación.
Esa misma semana vinieron mis tíos y prim@s a pasar unos días (mes de Agosto). Seguían las miradas y continuaban los comentarios entre mis familiares.

Una tarde, en la playa del club, lógicamente, se hizo un grupo con los monitores y todos nosotros, en plan “Hola qué tal…”, “De vacaciones” Bla, bla, bla… Y yo… sin decir nada, sólo el saludo inicial; mejor no abría la boca… por que era un arma de doble filo… repito lo que dije antes, no me relaciono para evitar problemitas, y mejor todavía si creen que no hablo francés o no les entiendo…

…. El grupo estaba incompleto, “el armario empotrado” estaba en la motora… pero claro… esta oportunidad no la podía desaprovechar él… Se lanzó al agua… y se unió a sus colegas… todo sonriente. Fue entonces cuando empezaron los comentarios de mis familiares sobre la sonrisa de oreja a oreja de este chico… Lo siento más por él que por otra cosa… en ese momento sólo quería que me tragara la tierra. Uno de los monitores era portugués… y se estaba enterando de casi todo lo que decían… Craso error… y común entre los míos…la falta de prudencia con los comentarios y no agarrarse la lengua pensando que quien está contigo no te entiende. Esta vez, consiguieron cabrearme. La mirada asesina junto con un “Ya es suficiente”, hizo que se disolviera el grupo.
Para entonces, yo no pasaba la semana en la Urbanización, sólo iba los fines de semana. Seguía siendo primeros de Agosto. Mis primos no se habían ido. Un sábado nadie quiso ir a la playa… así que nos fuimos mi padre y yo solos a dar la vuelta de siempre. El transcurso de la mañana playera fue de lo más normal… pero al emprender el camino de regreso vino a saludarnos el portugués (estaban todos sentados a orilla de playa conversando). Le dio la mano a mi padre… bonjour…bla bla bla… y por alguna extraña razón, me dio la mano a mí también; educación ante todo, le doy la mano y me da dos besos… (esa es la costumbre en España, la gente cuando se saluda, da dos besos), yo digamos que correspondí por costumbre…y todo dentro de un auténtico shock…

porque… un momento… qué hace éste dándome dos besos!!!???
Con la sorpresa a rastras… mi padre no hacía más que echarme el broncazo del siglo… Atención, argumentos: Es que yo provoco la situación…

… Claro, es verdad, voy de “antisociable”… y esa era la explicación??
Medidas a tomar: ni un fin de semana más en Marruecos. Si quería compañía para no ir solo a la playa… sorry… pero conmigo que no contara. Se acabaron los comentarios… se acabó todo.
En septiembre, al terminar la temporada de veraneo del Club, todos los monitores se tomaron fotos con él… Fotos que tuve que imprimir yo. (Si chicas... hay fotos del negro

)
La moraleja me la guardo, porque es cruel, pero más aún por respeto a quién no está presente, y no se puede defender.
